TRES VALORES
En esta fiesta de la Trinidad de Dios se recuerdan y proclaman unas palabras que el evangelio de Juan pone en labios de Jesús cuando habla con Nicodemo: “Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo Único, para que no perezca ninguno de los que creen en el, sino que tengan vida eterna” (Jn 3, 16). Tres valores se anuncian en el texto.
• El valor del amor. Es un don gratuito e inmerecido que Dios ofrece al mundo, es decir a la entera familia humana. Dios no nos ha amado por ser nobles o buenos. Podemos llegar a serlo precisamente porque Él nos ha amado previamente.
• El valor de la fe. Es nuestra respuesta agradecida a ese diálogo por el que Dios nos ofrece su amor. Creer no es sólo afirmar unas verdades. Creer es aceptar a Jesús como Señor y Salvador que ha entregado su vida por nosotros.
• El valor de la vida. Es este el resultado de ese diálogo de amor y de fe. La vida verdadera, la vida definitiva no es fruto del esfuerzo humano. Es la donación del Dios viviente que nos incorpora a su propia vida.
Tres valores que nos definen como cristianos, tres valores que orientan nuestra peregrinación por el mundo y tres valores que estamos dispuestos a testimoniar cada día.
PERSONA Y COMUNIDAD
En la segunda lectura de hoy se recoge una bendición que san Pablo escribe a los Corintios: “La gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo esté siempre con vosotros”.
• El amor del Padre que eligió, liberó y perdonó a Israel ha sido derramado sobre nosotros como prenda de elección, liberación y perdón.
• La gracia y la verdad nos han sido dadas por Jesucristo, que nos ha llamado amigos y nos ha invitado a seguirle por el camino.
• La comunión del Espíritu nos libera de la dispersión y del egoísmo narcisista para reunirnos en una comunidad de vida y de esperanzas compartidas.
En esta fiesta de la Trinidad Santa de Dios meditamos esta bendición. Agradecemos la revelación de Dios. Y tratamos de anunciar la dignidad de cada persona y el gozo de participar de la fraternidad comunitaria.
En esta fiesta de la Trinidad de Dios se recuerdan y proclaman unas palabras que el evangelio de Juan pone en labios de Jesús cuando habla con Nicodemo: “Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo Único, para que no perezca ninguno de los que creen en el, sino que tengan vida eterna” (Jn 3, 16). Tres valores se anuncian en el texto.
• El valor del amor. Es un don gratuito e inmerecido que Dios ofrece al mundo, es decir a la entera familia humana. Dios no nos ha amado por ser nobles o buenos. Podemos llegar a serlo precisamente porque Él nos ha amado previamente.
• El valor de la fe. Es nuestra respuesta agradecida a ese diálogo por el que Dios nos ofrece su amor. Creer no es sólo afirmar unas verdades. Creer es aceptar a Jesús como Señor y Salvador que ha entregado su vida por nosotros.
• El valor de la vida. Es este el resultado de ese diálogo de amor y de fe. La vida verdadera, la vida definitiva no es fruto del esfuerzo humano. Es la donación del Dios viviente que nos incorpora a su propia vida.
Tres valores que nos definen como cristianos, tres valores que orientan nuestra peregrinación por el mundo y tres valores que estamos dispuestos a testimoniar cada día.
PERSONA Y COMUNIDAD
En la segunda lectura de hoy se recoge una bendición que san Pablo escribe a los Corintios: “La gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo esté siempre con vosotros”.
• El amor del Padre que eligió, liberó y perdonó a Israel ha sido derramado sobre nosotros como prenda de elección, liberación y perdón.
• La gracia y la verdad nos han sido dadas por Jesucristo, que nos ha llamado amigos y nos ha invitado a seguirle por el camino.
• La comunión del Espíritu nos libera de la dispersión y del egoísmo narcisista para reunirnos en una comunidad de vida y de esperanzas compartidas.
En esta fiesta de la Trinidad Santa de Dios meditamos esta bendición. Agradecemos la revelación de Dios. Y tratamos de anunciar la dignidad de cada persona y el gozo de participar de la fraternidad comunitaria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario