NOVIEMBRE: Personajes bíblicos, fin del Año Litúrgico, fichas, manualidades, actividades, libros, humor, juegos, cómics, resúmenes, fichas, lecturas, videoclips, música... ***Si bien los materiales propios del blog están protegidos, su utilización ES LIBRE (aunque en ningún caso con fines lucrativos o comerciales) siempre que se conserve el diseño integral de las fichas o de las actividades así como la autoría o autorías compartidas expresadas en las mismas.
Enlaces a recursos sobre el AÑO LITÚRGICO en educarconjesus
San Marcos, evangelista. 25 de abril
Nos Vamos de Vacaciones
Queridos amigos. Todos nos merecemos unos días de descanso y vivencia de nuestra fe en esta semana Santa tan intensa. Os deseo que relajéis el espíritu para que el Señor os inunde con su amor a través del misterio de su pasión, muerte y RESURRECCIÓN.
NOS VOLVEMOS A VER-LEER EN POCOS DÍAS. DISFRUTAD, SENTID, AMAD.
Entrar en Jerusalén (Por José-Román Flecha)
LA ACLAMACIÓN
Por otra parte, el evangelio de Mateo que hoy se proclama antes de la procesión (Mt 21, 1-11) se detiene a referir que Jesús es acogido con gritos de júbilo:
Por otra parte, el evangelio de Mateo que hoy se proclama antes de la procesión (Mt 21, 1-11) se detiene a referir que Jesús es acogido con gritos de júbilo:
- “Hosanna al Hijo de David”. Esta antigua expresión de súplica, con el tiempo se había convertido en una aclamación de júbilo. En este caso era un grito de esperanza. Como Hijo de David lo habían invocado los ciegos (Mt 9,27). Ahora la multitud lo acogía como al restaurador del reino de David.
- “Bendito el que viene en nombre del Señor”. Con esa aclamación se acogía a los peregrinos que llegaban a Jerusalén por la fiesta de las Tiendas (Sal 118,26). Jesús había manifestado varias veces su convicción de haber sido enviado por Dios. El grito de la multitud era el eco de su conciencia mesiánica.
- “Hosanna en las alturas”. A la hora del nacimiento de Jesús, los ángeles proclamaban la gloria de Dios “en las alturas” (Lc 2, 14). Ahora las gentes del pueblo proclamaban la gloria de Dios que se manifestaba en Jesús. En la humildad del que llegaba a la Ciudad Santa, se hacía visible la grandeza y la misericordia del Altísimo.
EL CONTRASTE
Con todo, el relato que hoy se lee y proclama deja entrever dos posturas diferentes. La de los habitantes de Jerusalén y la de los que acompañan a Jesús que baja del Monte de los Olivos. En esas posturas se anuncia el choque de las actitudes que habrán de repetirse a lo largo de los siglos ante la persona y la misión de Jesús.
- “Bendito el que viene en nombre del Señor”. Con esa aclamación se acogía a los peregrinos que llegaban a Jerusalén por la fiesta de las Tiendas (Sal 118,26). Jesús había manifestado varias veces su convicción de haber sido enviado por Dios. El grito de la multitud era el eco de su conciencia mesiánica.
- “Hosanna en las alturas”. A la hora del nacimiento de Jesús, los ángeles proclamaban la gloria de Dios “en las alturas” (Lc 2, 14). Ahora las gentes del pueblo proclamaban la gloria de Dios que se manifestaba en Jesús. En la humildad del que llegaba a la Ciudad Santa, se hacía visible la grandeza y la misericordia del Altísimo.
EL CONTRASTE
Con todo, el relato que hoy se lee y proclama deja entrever dos posturas diferentes. La de los habitantes de Jerusalén y la de los que acompañan a Jesús que baja del Monte de los Olivos. En esas posturas se anuncia el choque de las actitudes que habrán de repetirse a lo largo de los siglos ante la persona y la misión de Jesús.
• “Al entrar en Jerusalén, toda la ciudad preguntaba alborotada: ¿Quién es este?” Se repite el espanto que produjo la llegada de los Magos (Mt 2,3). Los habitantes de Jerusalén se han acomodado al culto del templo y a la presencia de los romanos. No quieren sobresaltos. Pero en su asombro se refleja también la inquietud de los que hoy ignoran o rechazan la presencia, el mensaje y la obra de Jesús.
• “La gente que venía con él decía: Es Jesús, el profeta de Nazaret de Galilea”. Esa es la respuesta de los peregrinos y de los que siguen al Maestro. Las gentes más sencillas han descubierto en Jesús al profeta que viene de parte de Dios. No tienen prejuicios contra los galileos. En su entusiasmo se refleja también la buena voluntad de los que hoy escuchan la palabra de Jesús y tratan de llevarla a la práctica en su vida.
Domingo de Ramos. Aproximación a las lecturas.
Os propongo este enlace que conduce al comentario sobre las lecturas del domingo de Ramos elaborado por el lectoral de la catedral de León, uno de los mayores especialistas en textos joánicos de Europa, participante en varias traducciones bíblicas y antiguo profesor mío de Nuevo Testamento, D. Felipe Fernández Ramos.
Subida a Jerusalén. Benedicto XVI
Cuatro respuestas de Benedictgo XVI extraídas del libro "Jesús de Nazaret II. Desde la entrada en Jerusalén hasta la Resurrección". Madrid 2011, Ediciones Encuentro
¿Por qué se dice que Jesús “subió” a Jerusalén? “Es ante todo una ‘subida’ en sentido geográfico: el Mar de Galilea está aproximadamente a 200 metros bajo el nivel del mar, mientras que la altura media de Jerusalén es de 760 metros sobre el nivel del mar. Como peldaños de esta subida, cada uno de los Sinópticos nos ha transmitido tres profecías de Jesús sobre su Pasión, aludiendo con ello también a la subida interior, que se va desarrollando a lo largo del camino exterior” (p.11-12)
¿Cuál es el objetivo de la subida a Jerusalén? “La última meta de esta ‘subida’ de Jesús es la entrega de sí mismo en la cruz, una entrega que reemplaza a los sacrificios antiguos” (p. 12)
¿Cómo entra Jesús en Jerusalén? “Jesús entra en la ciudad montado en un borrico prestado, que inmediatamente después devolverá a su dueño... Esto puede parecer más bien irrelevante para el lector de hoy, pero para los judíos contemporáneos de Jesús está cargado de referencias misteriosas” (pp.13-14)
¿Cómo es posible que Jesús fuera recibido con alabanzas en Jerusalén y al cabo de pocos días fuera crucificado? “La escena del homenaje mesiánico a Jesús tuvo lugar al entrar en la ciudad, y... sus protagonistas no fueron los habitantes de Jerusalén, sino los que acompañaban a Jesús entrando con Él en la Ciudad Santa... Algo se había oído hablar del profeta que venía de Nazaret, pero no parecía tener ninguna relevancia para Jerusalén, no era conocido. La multitud que homenajeaba a Jesús en la periferia de la ciudad no es la misma que pediría después su crucifixión” (pp.18-19)
Resurrección de Lazaro Jn 11,1-45 Criptograma
Resurrección de Lazaro Jn 11,1-45 Cruzada
La amistad y la fe (por Jose-Román Flecha)
El evangelio que se proclama el cuarto domingo de cuaresma recoge el relato de la resurrección de Lázaro (Jn 11, 1-45). El texto juega con las dos dimensiones que configuran nuestra existencia: la realidad que nos revela como seres humanos y la apertura al ámbito divino. Las dos son importantes e imprescidibles. Las dos confluyen para contribuir a nuestra realización.
En el plano de lo natural se sitúan la amistad y el amor, la enfermedad y la nostalgia, la llamada y la interpelación al amigo, la muerte del ser querido y el llanto del que pasa por el trance del duelo. Nada de todo eso puede ser ignorado. Sería un error trivializar esas realidades y despreciar los sentimientos que desatan en nosotros.
En el plano de lo sobrenatural está la necesidad de la fe. Hasta siete veces aparecer el verbo “creer” en este relato. Preguntada por Jesús, Marta afirma creer que Él es el MesÌas, el Hijo de Dios que había de venir al mundo. Jesús ora, esperando que la gente que le rodea crea que el Padre lo ha enviado. Y los discípulos creen también en Jesús al ver que ha devuelto a Lázaro la vida.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)